"El Gobierno no tiene un detalle de cariño con los contribuyentes ni en navidades"
(Mariano Rajoy, candidato por el PP a la presidencia del Gobierno)
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Si hay algo de lo que siempre he desconfiado especialmente es de las decisiones tomadas en caliente y de los presuntos buenos deseos que se dicen tener en navidades, por lo que estoy segura de que si el Gobierno, de repente, hubiera lanzado una medida favorable al contribuyente por ser navidad, ya estaría preguntándome de qué manera nos la iban a sacar de las costillas.
Por otra parte, esta frase del Sr. Rajoy peca de un infantilismo rayano en la oligofrenia. Una buena oposición que se precie de serlo tendría que utilizar unos argumentos más sólidos para expresar su disconformidad con las políticas gubernamentales en vez de tratar a sus potenciales votantes como si fueran parvulines que esperan con ilusión la llegada de los Reyes Magos.
Como contribuyente y como ciudadana de a pie, hace ya mucho que dejé de creer en cuentos de navidad y, como a la que más, me jode que me suban el precio de la luz y del AVE, me da por saco no poder fumar mientras escribo tomándome un café en mis bares favoritos y me toca la moral la escabechina que están haciendo en materia de política laboral y social, pero no me duele más porque sea navidad. Pensaría lo mismo si todo esto se aprobara un cinco de marzo o un doce de octubre.
Por otra parte, esta frase del Sr. Rajoy peca de un infantilismo rayano en la oligofrenia. Una buena oposición que se precie de serlo tendría que utilizar unos argumentos más sólidos para expresar su disconformidad con las políticas gubernamentales en vez de tratar a sus potenciales votantes como si fueran parvulines que esperan con ilusión la llegada de los Reyes Magos.
Como contribuyente y como ciudadana de a pie, hace ya mucho que dejé de creer en cuentos de navidad y, como a la que más, me jode que me suban el precio de la luz y del AVE, me da por saco no poder fumar mientras escribo tomándome un café en mis bares favoritos y me toca la moral la escabechina que están haciendo en materia de política laboral y social, pero no me duele más porque sea navidad. Pensaría lo mismo si todo esto se aprobara un cinco de marzo o un doce de octubre.