domingo, 23 de diciembre de 2012

INSUMISIÓN

"Te sientes tan fuerte que piensas que nadie te puede tocar."
(Héroes del Silencio)

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Harta de esas tardes de domingo en las que la soledad se me sube a la espalda, cansada de la sensación de que la vida puede llegar a ser a veces un verdadero peñazo, aburrida de ver las mismas caras avinagradas que ocultan su acritud con sobredosis de sacarina, y saturada de malas noticias que cada vez están peor redactadas, me declaro en rebeldía.

Desacato las órdenes de consumismo desaforado que disfrazan de bien común lo que no es sino beneficio de un@s poc@s, desobedezco el mandato de miedo que quieren que sienta para hacerles creer que dependo de ell@s y me niego a malvender mi tiempo para pagar una deuda que no es la mía,

Me siento fuerte, me siento segura: soy insumisa.

jueves, 6 de diciembre de 2012

COMO NO SEA POR LOS CUERNOS...

"Soy como un toro bravo, me crezco con el castigo"
(José Ignacio Wert, Ministro de Educación y Cultura de España)

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De ciertos polvos vinieron tales lodos y, cuando una cartera tan importante como es la de Educación y Cultura cae en manos de un personaje tan patético, capaz de afirmar con pleno convencimiento una frase tan grotesca, no deberíamos sorprendernos de que la educación y la cultura española vayan sufriendo una trepanación cada vez más profunda con cada vuelta de berbiquí que suponen las medidas, a cual más disparatada, impuestas por quien niega la democracia de todo proceso educativo.

Atacar la realidad plurilingüe de un país, defender la competitividad frente al respeto y la solidaridad cuando la educación pasa de ser un derecho universal a un privilegio de élites, imponer una religión dentro de un estado aconfesional y subvencionar el maltrato animal mientras el resto de manifestaciones culturales son consideradas como "alternativas de ocio" son medidas indefendibles ante un estado de derecho que se supone constitucional.

Por cierto, el toro bravo no se crece con el castigo; cuando se siente atacado, se defiende con lo único que tiene: los cuernos. Eso es lo único que nuestro ministrillo tiene en común con tan precioso animal.