miércoles, 29 de diciembre de 2010

NI QUE FUERA EL AGUINALDO

"El Gobierno no tiene un detalle de cariño con los contribuyentes ni en navidades"
(Mariano Rajoy, candidato por el PP a la presidencia del Gobierno)
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Si hay algo de lo que siempre he desconfiado especialmente es de las decisiones tomadas en caliente y de los presuntos buenos deseos que se dicen tener en navidades, por lo que estoy segura de que si el Gobierno, de repente, hubiera lanzado una medida favorable al contribuyente por ser navidad, ya estaría preguntándome de qué manera nos la iban a sacar de las costillas.

Por otra parte, esta frase del Sr. Rajoy peca de un infantilismo rayano en la oligofrenia. Una buena oposición que se precie de serlo tendría que utilizar unos argumentos más sólidos para expresar su disconformidad con las políticas gubernamentales en vez de tratar a sus potenciales votantes como si fueran parvulines que esperan con ilusión la llegada de los Reyes Magos.

Como contribuyente y como ciudadana de a pie, hace ya mucho que dejé de creer en cuentos de navidad y, como a la que más, me jode que me suban el precio de la luz y del AVE, me da por saco no poder fumar mientras escribo tomándome un café en mis bares favoritos y me toca la moral la escabechina que están haciendo en materia de política laboral y social, pero no me duele más porque sea navidad. Pensaría lo mismo si todo esto se aprobara un cinco de marzo o un doce de octubre.

domingo, 26 de diciembre de 2010

ES SÓLO UNA FECHA MÁS

El dolor no tiene horario ni fecha en el calendario.

Llegará el uno de enero y con él un nuevo año pero todo seguirá igual: la misma tristeza, idéntica soledad y sólo la ilusión justa para pasar el día.

No hay fecha de fin de contrato con la nostalgia ni cita previa para reencontrarse con la alegría, sólo la incierta esperanza de que el día menos pensado llegará la consciencia de que el vacío ya no existe.

Los reyes magos son una simple quimera y las soluciones deus ex machina no trascienden la mera ficción. Sólo es real la añoranza como auténticas las lágrimas que inspira y la fuerza que empuja a que algún día dejen de brotar.

Mientras tanto, hay que seguir intentando crear momentos felices.

viernes, 24 de diciembre de 2010

PORQUE SEGUIMOS AQUÍ AUNQUE QUERÁIS HUNDIRNOS

"Aun con las ilusiones desteñidas y el escepticismo rampante, tenemos muy claro que seguimos siendo de los nuestros. Y que la historia no está escrita. De modo que el fatalismo y la resignación quedan descartados"
(Iñaki Gabilondo)
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Nuestros adversarios quisieran vernos así, divididos y derrotados, pero cuando sólo nos queda la dignidad inmanente a nuestra condición de ciudadan@s, éste es el peor momento para rendirnos y conformarnos con las absurdas excusas de siempre que sólo son el recurso de la gente mediocre.

Aún podemos decidir entre unirnos a la masa que ya sufre de lumbalgia de tanto doblar el lomo o seguir conservando nuestra esencia libertaria para elegir lo que queremos consumir y lo que deseamos leer. Podemos elegir entre creernos las historias que nos cuentan o ser quienes escribamos nuestra propia historia.

Yo ya escogí en su día y sé que elegí bien.

lunes, 20 de diciembre de 2010

CAMBIO DE MANO

¿Por qué la mayoría de la gente en el supermercado, en el momento de vaciar el carro o la cesta, lo hace cogiendo cada vez un artículo con una mano para pasárselo a la otra, antes de dejarlo en la caja, en vez de agarrar varios artículos de una vez con las dos manos?

martes, 14 de diciembre de 2010

Y YO ME LO SIGO PREGUNTANDO

Esta vez no es porque me hayan dicho que estoy guapa. Yo misma lo observo en mis fotografías.

¿Por qué en estas últimas fotos me veo más atractiva que en las de hace un año si entonces era mucho más feliz que ahora? ¿Será que me favorece la tristeza?
Pues si es así, vaya mierda.

lunes, 6 de diciembre de 2010

¡DE UNA EN UNA, POR FAVOOOOR!

Hoy es de esos días en los que me siento como si tuviera una guindilla metida por el culo. No puedo parar quieta y las ideas se me amontonan en la cabeza pugnando por salir sin orden ni concierto. "¡A mí! ¡A mí" parecen gritarme cada vez que cojo un folio para anotar algo con la intención de escribir sobre ello.

Termino de leer Sputnik, mi amor e indefectiblemente mi vista se va a la pila de libros pendientes para leer. Miro la prensa y me sigo cabreando sobre el tratamiento que los medios le han dado al plante de controladores aéreos, lo cual me lleva a buscar alguna cita de Gramsci o de Chomsky y recuerdo que tengo que regalarme Armas silenciosas para guerras tranquilas. Entro en Facebook y me encuentro la reseña que Cris ha hecho sobre No te supe perder y decido que me lo voy a regalar también. Mi pila de libros vuelve a mirarme de forma acusadora. Sí, ya sé que necesitaría tres meses leyendo a full time para hacerla desaparecer.

Carlos me avisa de que empieza a llover y me levanto corriendo a recoger la ropa del tendedero. Apenas deja de llover en todo el día y, por la tarde, miro distraidamente por la ventana para caer en la cuenta de que es domingo y como todas las tardes de domingo me sientan tan mal, especialmente si llueve, me entra el ataque de melancolía y me da por buscar canciones nostálgicas en Youtube. No estaría mal escribir algo sobre la nostalgia y los recuerdos de tiempos felices de caramelo así que saco un folio nuevo y me pongo a ello.

Me levanto para ir al baño y Carlos aprovecha para quitarme el ordenador, así que decido ponerme a fregar los cacharros mientras pienso que debería comprarle un portátil para él solo y así poder tener de una vez mi propio espacio para escribir. De repente, me vienen a la cabeza los dos relatos en los que estoy trabajando y que suponen todo un reto para mí: mi primer relato largo que ya casi está terminado y un relato corto en el que también por primera vez voy a utilizar el recurso de la metaliteratura y que, sin embargo, se me está atascando un poco.

Vuelvo a poner música y escucho a Paco de Lucía. Suena En La Caleta y recuerdo un power point que hice hace un año con fotos de esa playa para ilustrar mi poema Mar de cerca. Pienso que estaría bien aprovechar este puente para salir a hacer fotografías con vistas a preparar algún álbum bonito o, simplemente, colgarlas en Mistress of Puppets que lo tengo muerto de risa. Pero, ¿qué coño?, si tengo aún por editar las fotos que hice en Santander y Liérganes y las que saqué la última vez que estuve en Cádiz...

Frío unas empanadillas para Carlos y éste, por fin, me deja el ordenador libre. Abro el correo mientras tarareo Wherever I may roam y tomo nota de un par de actividades culturales que hay esta semana en Zaragoza. Veo que tengo un par de mensajes en el feis y cuando los leo y respondo comienzo a mirar las entradas que han hecho mis amistades. Me encuentro el juego de Entrevista a tus amigos y me pongo a hacer el chorras con él durante un rato hasta que una de sus preguntas me hace recordar que es tardísimo y que aún no he cenado.

En fin, si tengo que resumir el día de alguna forma, todo se reduce a un cansancio infinito, un cenicero lleno de colillas y un montón de folios esparcidos por el suelo para, al final, haber escrito esta mierda de entrada. Aunque, bien mirado, si tengo en cuenta la poca atención que reciben mis blogs últimamente, tampoco me ha quedado tan mal.